Esta excursión es altamente recomendable para todos los públicos, porque sin un esfuerzo muy grande (8 kilómetros de ascenso para subir 800 metros, 16 kilómetros en total) nos muestra unos paisajes pirenaicos que bien pudieran servir de ejemplo de lo que es esta cordillera, para quien no pueda dedicarle muchos días. Eso sí, en los meses estivales.

Partiendo de Luz Saint Savoir hacia el Col de Tourmalet, encontraremos una amplia explanada desde la que suben remontes hacia las pistas de esquí. Nosotros subiremos por un camino de tierra que sale perpendicular a la derecha respecto a la citada explanada y nuestro sentido de llegada. A partir de ahí solo hay que seguir mojones de piedra en ascenso, paralelos al río, pasando primero por el Lac Coueyla y finalmente por el Mademosellette. Hay algunos puntos del recorrido en los que mana agua de la roca y de los que podremos beber. Aguas arriba de la mayoría de arroyos hay ganado en verano, por lo que no es recomendable.

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