Esta ruta que traigo ahora al blog es de las más bonitas que se pueden hacer por La Babia. El punto de inicio es la localidad de Torre de Babia. No es una ruta complicada, ya que recorreremos un total de 10 kms con un ascenso que no llegará a los 600 metros. No obstante, si no tenemos forma física, quizás se nos haga un poco dura por el ascenso y posterior descenso. Hay marcadas dos opciones diferentes, de manera que se puede hacer circular. Yo recomiendo la subida por la que hay más al sur ya que es más escalonada; eso sí, la bajada la haremos en un tramo con un descenso pronunciado, para luego ya continuar suavemente.

A partir de la nave de ganado, desaparecerá la pista y en su lugar continuaremos por una vereda sin dificultades técnicas, pero por la que perdemos las vistas al valle para ir encajándonos en la meseta donde se encuentra la laguna. A partir de este punto el paisaje se vuelve un poco más de alta montaña.

… y llegamos a la laguna. Una verdadera preciosidad, que nos explica su nombre por el hecho de estar cubierta de cañizo de este color. Aquí, o en el collado vecino, merece la pena un alto y rendirse un homenaje como el que nosotros nos metimos a base de chorizo y salchichón de Babia. Puede que el mejor chorizo que haya probado en mi vida… Una vez repuestos, emprendemos la bajada haciendo un arco a derechas.

La vereda en este tramo se ve un poco menos, pero lo suficiente para no perdernos. Una vez nos volvemos a asomar al valle, la distinguiremos abajo, pedregosa, y adivinaremos tras cruzar un arroyo el mejor trazado para alcanzarla. Luego, desembocará en un camino por el que llegaremos de nuevo a Torre de babia.

Si vamos con perros, encontraremos algunos puntos a lo largo del camino para que beban agua, por lo que no es necesario echar una gran cantidad de esta. Para los humanos, solo hay una fuente, al inicio de la ruta.