Después de mucho intentarlo, hemos conseguido reunirnos para intercambiar experiencias en un «Campus» de conducción Trail, para ir soltándonos en el apasionante mundo de rodar por pistas de tierra y no perecer en el intento. El entorno se ha prestado, el tiempo ha respetado contra todo pronóstico, los alojamientos y restaurantes han estado a la altura y, sobre todo, la compañía ha sido excepcional. Aquí las imágenes del fin de semana:
Los integrantes en la casa rural antes de salir:
Entrada en las pistas que circunvalan la sierra
Ramblas de arena para calentar motores
Paradas para calentar motores
Esta graba se hizo de lo más complicado de la jornada:
Bonito paseo a pie por la tarde